Mamen Sánchez nos presenta La felicidad es un té contigo

La directora adjunta de la revista ¡Hola! nos sorprende con esta novela de intriga y desparpajo que ha conquistado el corazón de miles de lectores entre los que se incluye Ana María Matute

 

La directora adjunta y directora en México de la revista ¡Hola!, Mamen Sánchez, acaba de publicar La felicidad es un té contigo (Espasa). Una novela ligera y divertida, donde se cuentan las soluciones desesperadas de cinco mujeres que hacen desaparecer a  todo un  ”gentelman” inglés en la España más profunda. Misterio y mucha acción en esta novela que se lee tan rápido como fue escrita. Es tan especial que hasta ha conquistado el corazón de la gran dama de las letras españolas. Ana María Matute dice de ella que es muy divertida.

 

Totalmente indicada para pasar un bien rato, tanto es así que ya va por su tercera edición. Esto es lo que nos contó la propia autora sobre este libro fresco y desenfadado:

 

¿Cómo surgió la idea de escribir este libro?

Por un problema que tuvimos en la oficina y mi amiga Maru, que es la directora de la redacción de allí, estaba muy preocupada, y otra amiga, dijo “venga vamos a transformar este problema en una novela graciosa para que se te pase el disgusto”. Y además, es muy gracioso porque lo escribí rapidísimos, en cinco meses, puesto que ya estaba la idea, ya estaban los personajes y fue rapidísimo.

La felicidad, forma parte del título pero también está muy presente a lo largo de todo el libro y, además, coincide que hoy es el día de la felicidad…¿qué es, según tú, la felicidad?

La felicidad es algo que uno se tiene que trabajar, no es cosa de suerte.

 

¿Es un estado o un sentimiento?

Te la tienes que trabajar puedes partir de unos ingredientes y ser feliz o tener esos mismo ingredientes y ser un desgraciado; y no es que tengas que estar todos los días bobamente feliz pero en la vida tienes el deber de ser feliz por ti y por los que te rodean. Evidentemente, tienes bajones, pero lo importante es que cuando veas tu vida como un todo puedas decir “he sido feliz”.

 

¿Por qué sólo está protagonizada por mujeres?

El tipo de redacción yo quería que fuera muy pequeñita, donde estuviese mezclado lo personal con lo profesional y si está protagonizado por mujeres parece que la comunicación es como más fácil que si introduces una figura masculina, que conllevaría introducir otros temas.

 

¿De dónde has sacado el tiempo para escribirlo, con cinco hijos, la revista…?

Era una historia que yo necesitaba contar muy deprisa, escribía por las mañanas, de las 8.30 a las 9.30, todas las mañanas, luego los fines de semana escribía un poco más; además, me pasaba como cuando estás leyendo una novela que te engancha y te la llevas a todas partes para poder leerla en cualquier ratito, pues eso me ocurrió cuando escribía esta novela; yo hacía lo mismo pero con el portátil y escribía en cualquier sitio o apuntando alguna cosa en algún papel.

 

Personajes

¿Cuál es el personaje que mejor te hace sentir?

Pues me hace mucha gracia la mamá Remedios, me parece una abuela genial, como muy resolutiva.

 

¿Qué parte de tu experiencia en Reino Unido está reflejada en esta novela?

Pues gran parte de ella, porque tuve un intercambio con una familia inglesa, los detalles están un poco exagerados pero, la verdad, es que gran parte la he extraído de esta experiencia en el intercambio. Había muchas cosas que me sorprendía mucho, como, por ejemplo, la madre siempre iba con su agenda, era previsora y formal, y por nuestra forma de ser a mi me chocaban mucho. De hecho, esta mujer se transformó cuando vino a España, alucinaba con la Semana Santa,  con nuestra tradición familiar, con las familias gigantescas… De hecho estoy deseando enviarle la novela porque le va a encantar.

 

¿Si tuvieses que identificar la novela con un olor, con cuál sería?

Con  un té de flores.

 

¿Y con un color?

El rosa fuerte o el blanco, como la portada.

 Proceso creativo

¿Qué proceso creativo has seguido?

Esta vez ha sido así como a bocajarro, tengo la historia, sé lo que quiero hacer y tengo el tono que tiene que tener. De hecho, yo tenía ganas de hacer una novela más lineal porque todas las que he escrito hasta ahora contaban historias en varios tiempos y tenía ganas de hacer una novela tan sencilla que se escribiese y leyese linealmente, que empezase este día y termina en este otro, pero no lo he conseguido porque luego hay saltos en el tiempo.

 

¿Cuál ha sido la mejor experiencia y la peor a la hora de escribirla?

La mejor experiencia es cuando te dicen “qué bien me lo he pasado leyendo esta novela”, que alguien como Ana María Matute te diga eso es mucho, pero además, tu madre, tu abuela, amigos, que todos te diga los mismo es muy satisfactorio. Y la peor, no tengo nada que decirte porque no me ha dado más que satisfacciones.

 

Cómo ha sido ese cambio de registro porque en realidad esta novela no tiene mucho que ver con las anteriores que has escrito…

En las otras yo tenía la inquietud de escribir por esa admiración a mis escritores favoritos, quería escribir algo cuidando mucho el lenguaje, cuidando la construcción, el detalle; y en esta ha sido todo lo contrario, iba escribiendo según iba saliendo, con el corazón.

 

¿Qué te gustaría que pensasen los lectores cuando terminasen de leer esta novela?

Con que se entretengan, pasen un buen rato, les parezca un relato digno, en el sentido de que este bien escrito, no puedo pedir más.

 

Para terminar, no puedo dejar de preguntarte, ¿cuál es tu opinión sobre el futuro del periodismo?

Yo creo que hay muchos soportes porque el interés por saber, por entretenerse, por estar informado es humano y va a estar ahí siempre; entonces, el reto del periodista es adaptarse a los nuevos soportes, a los nuevos lenguajes, a las nuevas maneras de llegar, pero yo creo que pueden convivir muchos soportes y muchas maneras.