Entrevista a Dolores Redondo
Ayer, 15 de junio, se cerró el plazo de envío de manuscritos a la 66ª edición de los Premios Planeta de Novela. Este premio es uno de los más prestigiosos y mejor dotados del panorama internacional de la narrativa en castellano.
Hasta que se falle en octubre los ganadores (ganador y finalista) de la edición de 2017, os dejamos esta breve entrevista a la escritora Dolores Redondo, ganadora del Premio Planeta en su edición 2016 con su novela ‘Todo esto te daré’.
La novela tiene como escenario un paraje majestuoso de nuestra geografía, en concreto, la Ribeira Sacra, en el corazón de Galicia. Precisamente le preguntamos por la elección de este lugar. “Si la Ribeira Sacra hubiera estado en Andalucía la hubiera ubicado en Andalucía –nos indica Redondo–, pero la Ribeira Sacra está en el corazón de Galicia y se prestaba perfectamente para ubicar esta novela.” Nos confiesa que “fue mi hermana la que me descubrió este lugar, ella vive cerca de allí, pero desde hace poco tiempo. Ella sabe que me gustan los escenarios muy exigentes, los lugares un poco hostiles que de entrada no sean el lugar perfecto e idílico donde uno ubicaría una acción pero exprimen a los personajes, les obliga a sacar lo mejor y lo peor de sí mismos.”
A grandes rasgos, los lectores van a encontrar una muerte inesperada que antecede a una búsqueda de la verdad con un oscuro secreto familiar de por medio. La muerte es la de Álvaro, quien sufre un accidente que acabará con su vida. Cuando Manuel, su marido, llega para reconocer el cadáver, descubre que la investigación sobre el caso se ha cerrado con demasiada rapidez. El rechazo de la poderosa familia política de Álvaro, los Muñiz de Dávila, impulsa a Manuel a huir, pero le retiene el alegato contra la impunidad que Nogueira, un guardia civil jubilado, esgrime contra la familia de Álvaro, nobles mecidos en sus privilegios. Sobre Nogueira, la autora nos dice que “el protagonista es un guardia civil retirado, en unas circunstancias especiales y un tipo al que le repugna este tipo de poder, el que haya gente, familias o grupúsculos a los que se les siga prestando servicios, el que todavía exista un servilismo para que ni siquiera aquellos tengan que pasar por el bochornoso trámite de pedir un favor.”
Más personajes se unen en esta búsqueda, en esta historia, como Lucas, un sacerdote amigo de la infancia de Álvaro, quien se une a Manuel y a Nogueira en la reconstrucción de la vida secreta de quien creían conocer bien. La inesperada amistad de estos tres hombres sin ninguna afinidad aparente ayuda a Manuel a navegar entre el amor por quien fue su marido y el tormento de haber vivido de espaldas a la realidad, blindado tras la quimera de su mundo de escritor.
Una novela que según ya advertimos en la dedicatoria “les he dedicado a mis padres porque cuando era pequeña me parecían algo así como Romeo y Julieta, me parecía muy romántico que él se hubiera casado con mi madre a pesar de la opinión en contra de la familia, solo porque ella era del País Vasco y él era gallego. Sus padres tenían otro proyecto para él y no les apetecía mucho esta boda, se pensaban que le iban a perder, y le perdieron, pero no porque se fuera a otra región sino precisamente por el rechazo de su familia.”
Una región, unos escenarios que a Redondo le sirve “para caracterizar a Manuel cuando llega a la Ribeira Sacra en el peor día de su vida con la peor noticia a espaldas y que de entrada le parece hostil, con una serie de cosas que le parecen raras, con familias que viven en pazos, que todo esto es verdad, existe en la Ribeira Sacra. Es habitual, casi todos los pazos pertenecen a familias nobles. Galicia era el lugar adecuado para hablar de caciquismo.”
Una manera apasionante de descubrir nuestra magnífica geografía puede ser a través de los libros, quién sabe si después de leer esto no haya quien se lance a planear sus vacaciones este verano a la Ribeira Sacra.
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