Escritores y correctores, diez razones para llevarse bien

Álvaro Martín Valcárcel ofreció una ponencia sobre las relaciones entre autores y correctores y los principales errores que los escritores cometen al entregar su manuscrito a una editorial.

El acto tuvo lugar el jueves 11 de julio en un acton en FNAC Valencia que estuvo organizado por Olé Libros y UniCo.

«Escritores y correctores: diez razones prácticas para llevarse bien» fue el título de la ponencia que impartió Álvaro Martín Valcárcel, presidente de la Unión de Correctores, y que congregó a autores, correctores y editores que no quisieron perderse sus recomendaciones. Además, se reivindicó la figura del corrector como un eslabón importantísimo en el proceso de edición y publicación de una obra; la necesidad de poner en valor su trabajo y la lucha por el reconocimiento de su labor entre autores y editores.

Álvaro Martín destacó la importancia de una relación fluida y clara entre autor, editor y corrector a la hora de mejorar un manuscrito para su publicación. Una relación en la que los egos tienen que controlarse, incluso anularse, por el bien del trabajo que todos desarrollan. Las pautas de corrección deben quedar establecidas desde un primer momento: qué se quiere mejorar, hasta qué punto el autor va a confiar en el trabajo de su corrector, qué lineas rojas no quieren traspasar, etc.

La corrección de la poesía fue uno de los primeros puntos que se trataron en la ponencia, en la que se valoró si debía corregirse o no. Álvaro Martín defendió una corrección básica de erratas así como sugerencias de mejora de los poemas pero sin perder el estilo propio y las licencias poéticas propias de cada autor. No solo la narrativa está en el punto de mira y de trabajo de los profesionales de esta materia.

Durante la ponencia se efectuó un pase de diapositivas en las que se mostraron los principales y más frecuentes errores gramaticales y ortográficos que se encuentran en los manuscritos, algunos muy evidentes y otros cometidos por desconocimiento de las normas más recientes. Álvaro Martín remarcó la necesidad de una formación continua de escritores y correctores, tanto en una lengua tan rica en matices como es el castellano, como en tecnología (los programas de edición de texto son ricos en opciones que mejoran la entrega de los manuscritos a las editoriales y su posterior corrección).

Al finalizar la ponencia, los asistentes expusieron sus dudas al presidente de la UniCo y, además, respaldaron la reivindicación de la puesta en valor de la figura del corrector en la industria editorial.

Por nuestra parte solo nos queda añadir que la figura del corrector va unida al del buen escritror y es indispensable una revisión profesional de tu obra antes de la publicación.

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