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Entrevista. Clara Sánchez, Premio Planeta 2013. «Un escritor tiene que tener alma, tener cosas que decir e interesarle la gente»
23
Dic
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El cielo ha vuelto es la última novela de Clara Sánchez, con ella ha conseguido el Premio Planeta, un galardón que le va a permitir hacer lo que quiera con tranquilidad en un futuro próximo, según sus propias palabras. La autora ya ha publicado once novelas y ha recibido cuatro premios; porque además del Planeta antes también recogió el Premio Alfaguara en el año 2000 con Últimas noticias del paraíso; y en el año 2010 su novela Lo que esconde tu nombre consiguió el Premio Nadal y en 2013 el Premio Madarache.
Después de una trayectoria larga y llena de trabajo bien hecho; Clara Sánchez ahora nos invita a introducirnos en una trama plagada de intriga psicológica, con unos personajes que reflejan la sociedad en la que vivimos.
El cielo ha vuelto cuenta la historia de una modelo, Patricia, cuya ajetreada y exitosa vida le ha impedido bajar a su realidad básica: quiénes son las personas que la rodean. Poco a poco, tras un accidentado viaje en avión lleno de descubrimientos irá desentrañando su propia realidad que no es tan idílica como a priori parecía. El amor, la amistad, los sentimientos, la vida tal cual, es lo que nos cuenta Clara Sánchez en esta novela que nos traslada a mundos a veces mágicos.
De esta novela y de cómo es su forma de escribir hablamos en esta entrevista.
¿Por qué ese título?
El otro día, un lector me dijo que era curioso porque la novela comenzaba en el cielo, en un avión, y termina con el cielo.
Hay palabras que me gustan, en mis novelas siempre aparecen palabras como paraíso, cielo, en realidad, esas palabras que a mí me gustan tanto son como propuestas, vivimos en un mundo tan hostil, tan árido, tan incómodo, que las palabras que me gustan, como cielo, son para mí como una propuesta de un mundo más deseable, un mundo más justo, un poco más vivible y de ahí el título. Así que el hecho de que Patricia piense que el cielo ha vuelto quiere decir que todas esa aventura, esas dificultades que han tenido que superar han servido para algo.
¿Cómo es tu proceso creativo, cambia con cada novela o sigues alguna técnicas que aplicas siempre?
Bueno he ido cambiando , al principio de mi carrera, rompía más porque hacía tentativas y a lo mejor no cuajaban y tenía que romper cien folios; pero ahora he tomado ya el ritmo y la costumbre de madurar mucho más el tono, sobre todo el tono y la atmósfera, antes de ponerme a escribir
El tono es fundamental porque es la voz que transmite la novela, pero ea veces es muy difícil de conseguir, ¿tienes alguna técnica especial?
El tono es necesario, no te puedes desviar de ahí, es como una melodía, es como es y no puedes mezclar ahí cosas raras porque si te vas podrías distorsionar a los personajes y al resto de la novela y. la verdad, es que no me cuesta nada, una vez que ya lo tengo, precisamente, es lo que me ayuda a avanzar, a crear la historia, a que los personajes tengan cuerpo, sin el tono no puedo trabajar porque no sé en qué mundo están viviendo los personajes,. Digamos que el tono es el que crea el mundo de la novela, puede ser un mundo oscuro, un mundo alegre puede ser un mundo hostil, puede ser un mundo más amable; pero tengo que saber eso para saber lo que pueden sentir los personajes. Además, el tono tiene mucho que ver con el momento de mi vida en el que yo estoy viviendo, a lo mejor yo vivo en un momento de incertidumbre y entonces toda la historia se envuelve en incertidumbre, el tono es como el papel de celofán con que envolvemos las cosas, había una escritora que decía que era como el aceite en el que se fríen los huevos, se necesita un aceite en el que se fría la novela.
Entonces en realidad, escribes en el tono que tengas en ese momento en tu vida…
No, se influyen mutuamente, el tono sale de mi, pero luego también me retroalimento de lo que la novela me va dando, por ejemplo, en el caso de El cielo a vuelto es un tono liberador, porque toda la lucha de Patricia, todos los obstáculos por los que tiene que ir pasando, todo lo que tiene que ir descubriendo quiere decir que en la vida, por muchas dificultades que tengamos, por muchas cosas que nos ocurran, siempre podemos ganar la partida.
Cuando te pones a escribir ¿sabes ya el final de la novela?
No, sé cuál es el principio, un principio que, a veces, también se cambia; en este caso no, porque es muy potente y arrastra todo lo demás; pero el final, se va viendo, es como si fueses por una calle oscura, que vas alumbrando con una linterna y vas avanzando; vas viendo pero no lo puedes ver desde el principio, sino para mí no tendría interés porque los personajes tiene que evolucionar, la historia tiene que desarrollarse y es eso conforme avanzas lo vas viendo.
¿Qué tiene que tener un buen escritor para serlo?
Tener alma, tener cosas que decir, fijarse en la gente, querer a la gente, en el sentido de interesarle la gente, el mundo; creo que ese en potencia es un escritor; y luego ser un poco marginal; yo creo que el escritor tiene que vivir un poco así; como en la orilla, como en el margen para poder mirar y para poder absorber todo lo que tiene alrededor.
¿Qué te gustaría que pensase el lector cuando terminase de leer tu libro?
A mí, me encantaría que al cerrarlo dijeran qué bien me siento, qué bien lo he pasado, el cielo ha vuelto.
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