Juan Eslava Galán nos habla de su libro La Primera Guerra Mundial contada para escépticos

Juan Eslava Galán es uno de los autores más prestigiosos y prolíficos del panorama nacional. Escribe ensayo y ficción, con la misma maestría. Ahora, a punto de ver la luz su nuevo libro La Segunda Guerra Mundial contada para escépticos (Planeta), no hemos querido dejar pasar la ocasión de entrevistarlo para que nos cuente algunos detalles de su antecesora La Primera Guerra Mundial contada para escépticos (Planeta). Una obra hecha con rigor histórico pero sin dejar de lado los detalles que, como según cuenta el autor en esta entrevista, son los que sustentan la fluidez de la lectura. En esta obra encontramos jugosas anécdotas sobre la gran primera contienda mundial que nos ayudarán a entender un poco más sus causas, desarrollo y las posteriores consecuencias. Pero mejor que nos lo explique el propio autor.

El título ya es una declaración de intenciones, ¿se puede contar bien la historia sin ser escéptico?

Debería contarse, pero hay que hacer un esfuerzo por distanciarse de los documentos que como es sabido se manipulan en el mismo momento de concebirlos.

 ¿Cómo ha sido tu proceso de documentación respecto a la Gran Guerra?

Me he basado fundamentalmente en libros, o sea fuentes secundarias, pero también he recurrido a revistas, especialmente para ilustrar la actitud de los españoles ante la guerra.

 ¿Tenías un objetivo previo antes de ponerte a investigar?

Tan solo explicar la guerra con sencillez sin hacerme pesado.

 ¿De toda la documentación que has debido de atesorar, qué hechos te parecen más decisivos de todos los que aparecen en el libro?

Quizá el hecho de que las principales potencias prepararan una guerra breve y victoriosa.

De todos los personajes que has conocido literariamente en esta aventura, ¿con cuál te quedarías?

Son muchos e igualmente interesantes: Rasputín, el Barón Rojo, Mata Hari, Lawrence de Arabia…

Es curiosa la cantidad de anécdotas impensables que influyen en un conflicto de estas dimensiones, como lo que cuentas de las cavas de champán y sus efluvios en las tropas alemanas ¿crees que la historia la deciden estos detalles?

Me encantan los detalles cuando son significativos y te indican una actitud, un pensamiento, un prejuicio…

Comparas, en las páginas finales, el momento actual con la tercera guerra mundial, me pregunto cómo se escribirá esta tercera ¿tienes alguna idea al respecto?

La tercera es muy distinta, claro. Por una parte guerra económica, por otra, guerra soterrada entre grandes potencias y terroristas.

Leyendo tu libro, también, me ha venido a la cabeza una teoría alternativa acerca de las causas de la Gran Guerra y sucesivas, ¿y si ambas, Primera y Segunda, forman parte de un mismo plan y en realidad estaban bien diseñadas con antelación, como esta tercera?

Las dos guerras mundiales son la misma con un descanso intermedio. La segunda no se entiende sin la primera.

Al hilo de la anterior pregunta, ¿Es posible que ambos bandos en la Gran Guerra tuviesen las mismas fuentes financieras?

No exactamente las mismas, pero los paralelismos entre las dos guerras son evidentes. Lo intento subrayar en mi próximo libro que es la segunda guerra mundial.

Y la última, ¿qué te gustaría que pensase el lector cuando termine de leer La Primera Guerra Mundial contada para escépticos?

Que se ha enterado del tema y que la lectura le ha resultado fácil.