El tautograma como punto de partida
La gran novedad, Abecedario imposible (Olé Libros) de Salomé Chulvi, fue presentado online el 12 de junio. En la presentación, dirigida por el editor de Olé Libros Toni Alcolea, participaron además el prologuista del libro, Juan Luis Bedins (presidente de CLAVE), Kolo, ilustrador de la antología, la narradora y rapsoda Gloria Sevilla, quien leyó algún pasaje del libro, y la propia autora.
Según apuntó Alcolea: “El libro tiene una gran dificultad; es el más diferente de los libros que hemos publicado hasta ahora”. Se trata de una serie de relatos cortos, cada uno de los cuales está formado íntegramente por palabras que empiezan por la misma letra, lo cual se conoce como tautogramas, como apuntaba Juan Luis. Bedins manifestó estar ante un libro curioso de una autora inquieta, que aborda diferentes géneros. “Su obra», según señaló, «es un reflejo del profundo y rico mundo interior que atesora: rica, densa, de aparente complejidad, que nos muestra un discurso de lecturas poliédricas, pero profundamente humana”.
Kolo, por su parte, reconoció que había sido uno de los trabajos más difíciles que había emprendido, ya que, si bien el ilustrador suele escoger una parte del relato para ilustrar, en este caso “tenía que expresar todo el relato en el dibujo; ha sido difícil pero he disfrutado mucho”. Lo que primero se planteó para afrontar el reto fue escoger la estética y, como es un apasionado del cine en b/n y del cine negro, y del uso de sus luces, tuvo claro que iba a ir por esa gama y que iba a utilizar el collage. También añadió: «aunque lo ves como dibujos, son todo recortes de imágenes fotográficas; luego he trabajado las sombras”. Asímismo declaró que, como considera que el libro es muy vanguardista, “he buscado que la ilustración fuera también vanguardista pero a la vez muy entendible”.
Salomé confesó que lo que más le interesa del libro no es el libro sí, sino lo que simboliza: “todas esas veces que creo que no voy a lograr algo y voy más allá de las apariencias”. También “es un símbolo de llevar la creatividad a la vida”.
Un libro, que como bien definió Kolo: “más que raro, es de coleccionista; cualquiera a quien le gusten las letras debería tener Abecedario Imposible en su estantería”.